Ocho goles en Liga y dos más en Europa League han servido para zanjar cualquier debate extradeportivo sobre la titularidad en la delantera del equipo. Aritz Aduriz (Donostia, 1981), trabajo y compromiso personificados, venía a disfrutar pero le está tocando tirar del carro a base de goles.
Pepe Samitier, jugador y entrenador del Barça, le dijo una vez a Alfredo Di Stefano que «el público quería ver los lunes al delantero saltando en la fotografía junto al portero». Eran otros tiempos, pero el donostiarra Aritz Aduriz sigue siendo uno de esos delanteros a los que uno puede ver los lunes saltando junto al portero en la fotografía de los periódicos. A sus 31 años ha regresado a «su» Athletic, todo apuntaba a principios de verano que como sustituto del venerado Fernando Llorente, pero ahora mismo es titular indiscutible, por trabajo y por goles, en la delantera rojiblanca.
Lo de los grandes titulares y portadas, incluso que ya le pregunten sobre una posible llamada de Vicente del Bosque, con su veteranía eso lo relativizará....
Sí, porque al final, este tipo de situaciones, en mayor o menor medida parecidas, se dan. Al final sabes que de lo que se trata es de mantener una línea, porque hay días que la prensa te baja, otras te sube, y hay que relativizarlo. No es bueno ni fijarse cuando estás arriba, ni tampoco cuando pasas una mala situación...
Cuando Muñiz Fernández pitó el final en Granada, ¿qué le vino a la cabeza camino de vestuarios?
Una sensación muy grande de alivio, de satisfacción, sobre todo, por haber ganado. Lo necesitábamos para intentar cambiar la inercia que llevábamos.
¿Sobre todo alivio?
Sí, porque el partido se puso bastante de cara y nos tocó sufrir más de la cuenta.
Es que resulta difícil entender primeras partes como en Eibar o segundas como en Granada...
Sí, es verdad. Nos está costando mucho cerrar los partidos, hacer un partido completo. Es lo que pasa cuando estás ahí abajo y miras hacia arriba.
Porque al día siguiente, en sala de prensa, advertía de que no se había hecho nada, que solo se había ganado un partido...
Está claro que con ganar en Granada no basta para nada. Creo que el equipo, después de lo vivido el año pasado, las aspiraciones son mucho mayores que las que estamos ahora mismo. Y no hemos hecho absolutamente nada. Hemos ganado un partido y queda un mundo.
¿Tiene Aduriz su propia explicación sobre lo que le pasa al Athletic esta temporada?
Es difícil explicarlo, no sabría decir una causa. Habrán influido muchas cosas que se han sumado para que no estemos donde nos gustaría estar. Yo he disfrutado el año pasado viendo al Athletic, pero no como aficionado del Athletic sino como aficionado al fútbol, y la verdad es que es una... putada... no sé sí se puede decir así, pero es una faena que este año no se haya podido seguir con esa inercia tan bonita. Sí creo que todavía hay tiempo para darle la vuelta a la situación y en eso estamos... Lo intentaremos por lo menos.
Porque, por ejemplo, lo de Ander Herrera fue llegar y besar el santo; en su caso se lo tiene que estar echando a los hombros...
Es lo que te decía... Es un poco faena que después de haber visto la temporada pasada, el venir yo e Isma, te sientes un poco frustrado, porque veníamos con una ilusión de la leche, a disfrutar de todo lo que estaba pasando y bueno... te da rabia. Intentaremos darle la vuelta.
Hay gente, sobre todo aficionados, que por darle una explicación llegan a hablar de que el vestuario le está haciendo la cama al entrenador...
Lo de hacerle la cama al entrenador se comenta mucho en el fútbol, pero yo, sinceramente, es algo que no he entendido nunca porque, realmente, te estás haciendo la cama a ti mismo y echando piedras sobre tu propio tejado. Al final, todos estamos en un mismo barco.
¿Qué necesita el equipo para salir de esta situación, ganar un par de partidos seguidos más o necesita mucho más?
Con ganar un par de partidos no nos basta. Está claro que cuando tienes una situación delicada y la racha es tan mala, para cambiar la inercia a positiva ganar dos partidos ayuda, pero está claro que se trata de estar más unidos que nunca, tener muy claro lo que queremos y todos seguir en esa dirección. Hay que ofrecerse mucho individualmente para el equipo y trabajar todos a una. Y dar mucho más que reprochar.
¿Pero esa receta debería ser fácil, entre comillas, si hablamos de un vestuario que se presupone muy unido?
Está claro que eso no falta aquí, la unidad y honradez en el trabajo, pero hay veces, por muchas circunstancias, las cosas se tuercen, que nos gustaría saber porqué, pero no encuentras respuestas y cuesta mucho darle la vuelta... Pero estoy seguro de que la vamos a dar.
Esas inercias negativas que desde fuera no se entienden, pero que el futbolista sabe muy bien que pasan y no se explican...
Y pasan y pasarán... Tenemos un gran equipo, jugadores para estar mucho más arriba, creo que tenemos todos los alicientes para hacerlo muy bien, pero de repente se tuercen las cosas...
¿Puede haber una falta de experiencia para afrontar malas rachas como esta?
No, no. ¿Falta de experiencia en un equipo que ha jugado dos finales y ha vivido situaciones muy delicadas? Cuando más aprendes y más experiencias coges es en situaciones malas y creo que este equipo las ha vivido. A ver qué equipo supera situaciones más dolorosas que esta... Es sumar experiencias negativas, pero con el paso del tiempo te hacen crecer.
¿Y falta de liderazgos? Aritz es un recién llegado, pero ya se le apunta como una de esas voces autorizadas que tiran del carro...
No, no. Si por algo se caracteriza este equipo es porque tiene mucha gente que da un paso al frente. En ese aspecto yo estoy muy tranquilo.
Porque tras la derrota en Mestalla, tras el partido, más allá de los lamentos habituales de los jugadores, a usted se le vio muy dolido, «muy jodido» llegó a decir...
Hombre, al final tenemos que hacer todos autocrítica porque las cosas cuando no salen hay que intentar decirlas y no pasa nada. De nada sirve decir que todo es bonito, sería engañar a la gente que nos sigue.
¿Regresar al Athletic ha sido como cerrar un círculo?
No, en el fútbol nunca puedes decir que cierras un círculo porque cada día te sorprende más. Sí que es verdad que yo tenía una ilusión enorme por volver a jugar en el Athletic, me moría de ganas por estar aquí, por entrenar todos los días en Lezama, por jugar en San Mamés, por vestir la camiseta... Me encantaría decir que cierro el círculo, pero no se puede decir.
¿Vuelve con otra perspectiva de lo que es Athletic?
Bueno, cada cual sabe lo que significa para él, y para mí es sin duda el lugar donde más realizado me he podido sentir.
Y allá donde ha jugado, ha dejado muy buenos recuerdos y amigos. ¿Cuál es el secreto?
Al final se trata de estar contento donde uno está, pero no por obligación, sino porque disfrutas con lo que haces. Yo he tenido mucha suerte con la gente con la que me he encontrado en el camino, me he sentido muy arropado, incluso por la afición, pero sobre todo se trata de estar satisfecho con lo que haces todos los días. Eso es lo que la gente agradece.
Tras los goles en Granada prefería quitarse protagonismo, pero la realidad es que, al igual que el año pasado, en este equipo el delantero es el que asume casi toda la responsabilidad anotadora. ¿Le falta gol a esta plantilla?
Pero es cuestión de momentos, de rachas, estoy seguro de que la gente de medio campo marcará, que los goles se van a repartir. Quizá me ha tocado más a mí ahora, por mi posición, pero seguro que se repartirán.
Ser delantero titular en cualquier equipo exige esforzarse al máximo, pero no sé si con Fernando Llorente detrás uno tiene que trabajar el doble...
Hombre, saber que un jugador del nivel de Llorente, o de Toquero o de Igor Martínez, pero está claro que alguien del nivel de Llorente esté en un momento dado sin poder jugar, te hace estar muy alerta porque sabes que tienes que estar al máximo. Al final, tanto él como todos los demás buscamos el beneficio del Athletic. Yo estoy seguro, además, que él nos va ayudar un montón, meterá goles y el tiempo que esté con nosotros va a estar al cien por cien.
Fuente: Gara
0 comentarios:
Publicar un comentario