Seguramente nadie, ni siquiera el propio jugador, podía imaginar la importancia que Aritz Aduriz (San Sebastián, 1981) iba adquirir en el juego del Athletic cuando este verano selló su segundo regreso a la entidad rojiblanca. Era un viejo anhelo del presidente Josu Urrutia, que abonó por él cerca de 2’5 millones de euros. El guipuzcoano aterrizó en Bilbao para elevar las prestaciones en la punta de ataque y aumentar la competitividad en torno a Fernando Llorente, dueño de la delantera en los últimos años. Su llegada además colmaba el deseo de la grada de San Mamés, profundamente contrariada tras su polémica salida en 2008.
La decisión de Llorente de no renovar su contrato alteró los planes de Marcelo Bielsa, que otorgó la titularidad a Aduriz desde el principio. El resultado ha sido espectacular. El donostiarra suma 12 goles ligueros (tercer máximo goleador estatal) y 16 en total. Con 11 jornadas aún por disputar, está a tan sólo un tanto de superar su mejor registro en Liga y también en una sola temporada. Aunque a él sólo le preocupa el Athletic.
PREGUNTA: Le informamos de que los ‘leones’ nunca han ganado en Getafe.
RESPUESTA: ¿En serio? ¿Nunca? Bueno, pues esta será la primera vez.
P: No sé si ha tenido tiempo para ver un pequeño reportaje suyo en ‘El día después’ que ha revolucionado twitter en las últimas horas.
R: Un amigo me mandó un mensaje diciendo que le había hecho mucha gracia. Todavía no he tenido tiempo de verlo, lo haré cuando acabe esta entrevista.
P: En el vídeo se le ve intercambiando impresiones con los jugadores del Valencia y el árbitro tras dos jugadas polémicas ¿Se habla tanto en el campo como se muestra en las imágenes o simplemente estuvo más comunicativo por tratarse de sus ex compañeros?
R: (Risas) Supongo que cuesta menos cuando se trata de compañeros con los que has compartido vestuario durante dos años, pero yo creo que va según los partidos. Hay algunos en los que no cruzas casi palabra y otros que sí. Yo si tengo que decir algo, intento no quedarme callado y decirlo. Así estoy más tranquilo.